PLAQUETAS EN SANGRE

El estudio de plaquetas en sangre es un análisis clínico que permite conocer la cantidad de estas células sanguíneas responsables de ayudar a detener hemorragias. Las plaquetas, también llamadas trombocitos, cumplen un papel esencial en la coagulación al agruparse y formar tapones cuando se produce una lesión en los vasos sanguíneos. Su medición es clave para evaluar los niveles plaquetarios y detectar posibles alteraciones que afecten el proceso normal de coagulación.

Se solicita en personas con sangrados frecuentes, aparición de moretones sin causa aparente, sangrado nasal espontáneo, menstruaciones muy abundantes o como parte del seguimiento de trastornos autoinmunes, infecciones, leucemias, anemias o tratamientos que puedan afectar la médula ósea. También es útil en evaluaciones prequirúrgicas y en pacientes con sospecha de trombocitopenia (plaquetas bajas) o trombocitosis (plaquetas altas).

Este estudio permite el conteo total de plaquetas, que determina el número de trombocitos por microlitro de sangre. Valores bajos pueden indicar riesgo de sangrado, mientras que niveles elevados pueden asociarse con formación anormal de coágulos. También incluye el volumen plaquetario medio (VPM), que evalúa el tamaño promedio de las plaquetas y ayuda a identificar alteraciones en su producción o función.

Este estudio puede complementarse con pruebas como biometría hemática, frotis de sangre periférica o estudios de médula ósea cuando se requieren análisis más profundos sobre trastornos plaquetarios.

Considere tener un ayuno de 8 horas antes de que se le tomen sus muestras de sangre. Durante ese tiempo no debe ingerir alimentos ni bebidas. La ingesta de agua simple está permitida.

Un monitoreo adecuado de las plaquetas ayuda a detectar oportunamente complicaciones asociadas a hemorragias o trombosis.

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