¿Sabías que la clasificación BIRADS es clave para entender tu mastografía y ultrasonido mamario?
- 20 sep 2024
El Colegio Americano de Radiología detectó la necesidad de mejorar la interpretación de los estudios especializados para valorar los senos. Por ello, en 1993 decidió estandarizar la interpretación médica de las imágenes obtenidas, creando una clasificación específica para las lesiones mamarias observadas: El Sistema de Informes y Datos de Imágenes Mamarias (BI-RADS).
Desde entonces, esta clasificación ha sido actualizada en varias ocasiones, convirtiéndose en una herramienta indispensable para el diagnóstico de patologías mamarias, facilitando la comunicación médica entre radiólogos y especialistas. La última edición, publicada en 2014, amplió su uso no solo a la mastografía, sino también al ultrasonido y resonancia magnética.
Cuidar de la salud de tus senos es fundamental, y cuando te realizan una mastografía o ultrasonido mamario, es natural querer entender qué significan los resultados.
¿Qué características toma en cuenta la clasificación BIRADS?
Para entender cómo funciona la clasificación BIRADS, primero es importante saber que el tejido mamario está compuesto por diferentes elementos como la piel, vasos sanguíneos, glándulas y grasa.
Dentro de esta clasificación una de las características más relevantes es la densidad mamaria, que se define como la cantidad relativa de elementos radiópacos (blancos) en relación con la grasa radiotransparente (negra) en la imagen. Es esencial aclarar que la densidad mamaria no se correlaciona con el examen físico de la paciente.
Además, BIRADS toma en cuenta la presencia de anomalías/hallazgos importantes, como las masas, evaluando su forma, margen y densidad, o las calcificaciones, cuya ubicación se describe a través de la referencia de:
- Cuadrante de la mama:
- Superior externo (SE)
- Superior interno (SI)
- Inferior externo (IE)
- Inferior interno (II)
-
Profundidad dentro de la mama
-
Anterior (al frente)
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Media (en medio)
-
Posterior (atrás)
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Por último, BIRADS también considera las características asociadas, como la retracción de la piel o del pezón, el engrosamiento cutáneo, entre otros y la comparación con estudios previos.
¿Por qué es importante la correlación de la mastografía y el ultrasonido mamario?
La mastografía es la técnica habitual para el tamizaje del cáncer de mama. Sin embargo, su sensibilidad, es decir, la capacidad de la prueba para identificar una enfermedad; disminuye significativamente en senos densos, alcanzando apenas un 50%.
Por este motivo, el ultrasonido mamario es un estudio fundamental, ya que puede detectar cánceres de mama en etapa temprana que podrían estar ocultos por el tejido mamario denso, tanto benignos como malignos.
El ultrasonido es el método de elección para diferenciar entre lesiones sólidas y quísticas, así como caracterizar mejor los hallazgos mamográficos y evaluar de manera más precisa las lesiones palpables. De esta forma, la sensibilidad en la detección puede mejorarse considerablemente.
¿Qué significan las categorías de la clasificación BIRADS?
La clasificación BIRADS se organiza en seis categorías, basadas en los hallazgos obtenidos en los estudios de imagen del tejido mamario. Esta estandarización facilita que los médicos comuniquen los resultados de manera clara y tomen decisiones adecuadas sobre los pasos a seguir, como la realización de estudios adicionales, el seguimiento o la intervención necesaria. La Categoría 0 corresponde a una mastografía incompleta que requiere evaluación adicional, mientras que las Categorías 1 y 2 indican hallazgos benignos, y la Categoría 3 sugiere la necesidad de un seguimiento más cercano.
A partir de la categoría 4, los hallazgos son más sugestivos de malignidad. En estos casos, será el médico quien determine los estudios complementarios necesarios para obtener un diagnóstico más preciso y decidir los pasos a seguir. La interpretación de los resultados es una tarea exclusiva del médico especialista, quien está capacitado para guiar adecuadamente el proceso diagnóstico y tratamiento.
La clasificación BIRADS es una herramienta clave que los médicos utilizan para interpretar los estudios de imagen del tejido mamario, facilitando la detección oportuna. Realizarse estudios como la mastografía o el ultrasonido mamario permite forma de identificar posibles anomalías a tiempo, lo que puede marcar la diferencia en la toma de decisiones sobre tu salud.
Por: Dra. Gema Nandaí Nájera Valdez
Ced. Prof. 13591084
Escuela Superior de Medicina, I.P.N.
Elaborado: septiembre 2024
Bibliografía
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Elizalde-Pérez, A., & Rodrígues-Spiteri, N. (2016). Ecografía mamaria complementaria a la mamografía de cribado. Revista de Senología y, 29(2), 69?74. https://doi.org/10.1016/j.senol.2016.03.004
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Patel, M. D. (2024). Adnexal mass: Ultrasound categorization. UpToDate, Ed. Barbara Goff. https://www.uptodate.com/contents/adnexal-mass-ultrasound-categorization
Estudios relacionados
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La mastografía o mamografía es un estudio de gabinete que utiliza rayos x. Permite detectar anomalías en las glándulas mamarias que no se detectan con la palpación mamaria como tumores o quistes. El procedimiento es a través de la exploración del tejido mamario mediante imágenes generadas por un equipo especializado. La mastografía se realiza mediante la compresión suave de la mama entre dos placas de rayos X, lo que permite obtener imágenes detalladas de la estructura interna de la glándula.
Esta prueba está recomendada para mujeres mayores de 40 años, así como aquellas con antecedentes familiares de cáncer de mama, ya que permite detectar a tiempo posibles tumores y mejorar las probabilidades de tratamiento exitoso. En caso de tener menos de 40 años, es importante que el médico tratante emita una orden médica. Sus principales ventajas son sus resultados de alta calidad en la detección temprana de anomalías y su eficiencia.
Es importante que la persona sepa que no debe utilizar desodorante, lociones ni talcos en la zona de las mamas el día de la prueba, y que debe informar al médico si está embarazada o si tiene implantes mamarios. Adicionalmente, se recomienda programar la prueba en la segunda semana posterior al periodo menstrual para evitar molestias.
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El ultrasonido de glándula mamaria es un estudio no invasivo que se utiliza para detectar posibles anomalías en el tejido mamario. Esta prueba permite visualizar la estructura de las glándulas mamarias y detectar cambios, como quistes, masas o tumores. El ultrasonido funciona emitiendo ondas sonoras de alta frecuencia que se reflejan en los tejidos y, a partir de las imágenes obtenidas, se pueden identificar posibles anormalidades en el tejido.
La realización de este estudio es sencilla y rápida, ya que se aplica un gel en el área a estudiar y se desliza un transductor sobre la piel. Este tipo de ultrasonido es seguro y no causa dolor, por lo que es tolerado por la mayoría de los pacientes. Puede realizarse en mujeres de todas las edades, ya que permita una detección temprana de condiciones como quistes, fibroadenomas o lesiones sugestivas de cáncer.
Entre las ventajas de realizar un ultrasonido de glándula mamaria se encuentra su capacidad para detectar problemas en la mama, que puede confirmarse con una mastografía. Además, es una alternativa útil en mujeres jóvenes, con tejido mamario denso o durante el embarazo. Es importante tener en cuenta que este estudio no reemplaza a la mastografía, por lo que se recomienda realizar ambos con regularidad para una detección temprana y adecuada.
Al someterse a un ultrasonido de glándula mamaria, es importante que la persona conozca que no requiere preparación especial previa y que no representa ningún riesgo para la salud. Además, es fundamental seguir las indicaciones del médico para obtener un resultado correcto y, en caso de detectar alguna anomalía, seguir con las pruebas complementarias necesarias. Es importante recordar que la detección temprana de problemas en la glándula mamaria aumenta las posibilidades de un tratamiento exitoso.
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El perfil prevención de cáncer 2 es un conjunto de pruebas enfocado en la prevención del cáncer de mama y cáncer cervicouterino. El objetivo de estas pruebas es identificar las alteraciones que podrían indicar la presencia de anomalías estructurales.
El perfil incluye tres pruebas: la mastografía, que ayuda a identificar anomalías en el tejido mamario y posibles tumores; la citología cervical en base líquida, o Papanicolaou, que detecta alteraciones en las células del cuello uterino; y la colposcopia, una exploración detallada del cuello uterino con un colposcopio que permite visualizar lesiones o cambios que pudieran no ser visibles a simple vista.
La prueba está dirigida a mujeres mayores de 40 años o aquellas con antecedentes familiares de cáncer de mama o cuello uterino, aunque también se recomienda para cualquier mujer que desee conocer su salud. Las ventajas de realizar este perfil incluyen la posibilidad de detectar alteraciones antes de que se conviertan en cáncer, permitiendo un tratamiento oportuno y con mayor probabilidad de éxito. La detección temprana es clave en la lucha contra el cáncer, ya que muchas veces este no presenta síntomas en sus etapas iniciales.
Es importante seguir las indicaciones del laboratorio para la realización de las pruebas, como evitar el uso de cremas o desodorantes antes de la mastografía, y abstenerse de relaciones sexuales antes de la citología cervical en base líquida.
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