ECOCARDIOGRAMA PEDIÁTRICO

Un ecocardiograma pediátrico es un estudio diagnóstico no invasivo que utiliza ultrasonido para evaluar la estructura y función del corazón en niños, desde recién nacidos hasta adolescentes. Este procedimiento genera imágenes detalladas en tiempo real del corazón, permitiendo al médico analizar el tamaño, forma, funcionamiento de las cavidades y válvulas cardíacas, así como el flujo sanguíneo a través de las arterias y venas. El ecocardiograma pediátrico es especialmente útil para:

> Defectos cardíacos congénitos: Como comunicación interauricular, comunicación interventricular, tetralogía de Fallot, entre otros.
> Problemas valvulares: Como estenosis, insuficiencia o malformaciones en las válvulas cardíacas.
> Alteraciones del flujo sanguíneo: Como coartación de la aorta o hipertensión pulmonar.
> Miocardiopatías: Detecta debilitamiento o alteraciones en el músculo cardíaco.
> Infecciones o inflamaciones: Como endocarditis o miocarditis.

El procedimiento es indoloro y dura entre 30 y 60 minutos. Durante el estudio, se aplica un gel conductor en el pecho del niño, y el cardiólogo utiliza un transductor que se mueve suavemente sobre la piel para obtener imágenes del corazón. Dependiendo de la edad del paciente, podría ser necesario que esté tranquilo o incluso sedado para asegurar la calidad de las imágenes.

El ecocardiograma pediátrico es una herramienta esencial para diagnosticar y monitorizar enfermedades cardíacas en la población infantil, permitiendo una intervención temprana y un manejo adecuado.

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